viernes, 21 de septiembre de 2007

Ejercicio de resistencia, pero desde dentro: respuesta a un primer comentario

Nuestra creación nace indiscutiblemente desde lo ya existente, y cómo se estaba planteando la discusión sobre las artes visuales en Chile. Esto es bastante amplio, pero pasa fundamentalmente por plantearnos profesionalizar no sólo las prácticas de los artistas nacionales en la actualidad, sino también comenzar a incidir en la mirada que tiene la institucionalidad sobre nuestro quehacer. Así, pensamos que lo mejor era constituirnos en una asociación nueva, y así poder construir, o mejor dicho, sistematizar una discusión que ya había comenzado, pero esta vez con un cuerpo gremial que abarcara las voces disidentes, para de este modo comenzar a trabajar en estrategias de discusión al interior de las políticas culturales.

Es importante la existencia de canales y espacios de discusión que sean divergentes, pensando iguales asuntos. Las asociaciones ya existentes, como APECH y SOECH, son gremios que han levantando un modo de ver y abordar las problemáticas del arte en Chile. Nosotros deseamos construir otro modo que pueda levantar el debate sobre la visualidad nacional desde otro encuadre. Ahora bien, interesante asunto el que plantea Ingrid Vallverdú con aquello de "actualizar ese espacio sindical", refiriéndose a la APECH. Pienso, que va más allá de un proceso de reactualización; más bien pasa por un tema de representatividad: hay un número nada menor de artistas, gestores, productores, académicos, teóricos, curadores y pensadores de los asuntos del arte que necesitamos de un espacio más allá de prentender mancomunar sentidos sobre un ámbito profesional común; muy por el contrario, nos encontramos en el momento de la investigación aplicada, donde nuestro tema no es cuáles son las prácticas de la visualidad, sino más bien su actualidad, en relación con profundizar y profesionalizar la mirada que existe hoy sobre el arte, y todo esto desde nuestras complejidades y diferencias.